“Esta disposición creo que va a encarecer en un promedio del diez por ciento más el vehículo al importador. Aduanas también va a recaudar más, pero para nosotros los despachantes siempre será lo mismo. No afecta en nada este decreto”, refirió.
Paiva relacionó la disposición del Ejecutivo con la lucha de hace años iniciada en otros gobiernos para que se importe menos cantidad de vehículos usados, por el tema de la polución ambiental.
Indicó que la importación de autos usados generó siempre una buena recaudación para cada Gobierno, pero entiende que en la actualidad es mucho menor la cantidad.
“Creo que ya no se traen tantos vehículos de Chile. Si uno recorre el país puede ver que hay muchos y ya no se venden como antes. Hay poca venta y se abarataron bastante porque tienen poca salida. El mercado está lleno de vehículos usados”, enfatizó.
Añadió que el Gobierno actual necesita recaudar más, pero cree que para esto es mejor la opción de que aumente la importación de cero kilómetro, porque pagan un impuesto mucho más alto. “Se necesita traer más vehículos cero kilómetro que tiene diez veces más valor que los usados”, enfatizó.
Subrayó que los usados que vienen de Chile tienen un costo barato y como disminuyó la cantidad en la importación también bajan los ingresos en tributo.
El nombrado titular del gremio de despachantes aduaneros sostuvo que, por un lado, Aduanas necesita recaudación, pero por otro, hay una parte negativa que representará convertir el país en un cementerio de vehículos usados.
“En síntesis, la importación de vehículos usados tiene su parte positiva y negativa”, recalcó.
Finalmente, Paiva dijo que el aumento que se decretó fue de los derechos aduaneros que se pagan según la cilindrada de los vehículos.
