La mujer, quien se desempeña como mucama, alertó de lo ocurrido a la Policía en la tarde de este sábado y relató que el vehículo había ingresado aproximadamente a las 14.00.
Según datos de la Comisaría 15.ª Central, la misma se percató del hecho luego de que el hombre haya solicitado la cuenta.
“En ese lapzo ella puede divisar por la ventanilla a una persona del sexo masculino en compañía de un menor de 6 a 8 años aproximadamente, quien se encontraba llorando en el lugar”, detalló el comisario Ismael Guerrero en comunicación con la 970 AM.
Una vez que abandonaron el establecimiento, la trabajadora procedió a ingresar a la habitación para realizar el servicio de limpieza, momento en el que visualizó manchas de sangre en el piso y las sábanas.
El caso se encuentra en manos del Ministerio Público para su investigación, quien ya cuenta con los datos del vehículo proveído por el circuito cerrado.