El diplomático paraguayo mencionó que el proceso inició alrededor del año 1990 y valoró el trabajo realizado por todas las personas que trabajaron en este caso. Especialmente, destacó lo realizado por el excanciller Luis María Ramírez Boettner.
“Hizo una labor titánica de ir personalmente a revisar los papeles uno por uno con autorización judicial. Es una persona que dio todo para salvar a nuestro país de una injusta demanda”, recordó Loizaga.
Mencionó que con el fallo de la Justicia estadounidense se ratifica que el caso se trató de un fraude y, por esa razón, lo califica como un logro histórico.
“Siempre estaba pendiente la demanda, pero con todo lo que ocurrió anteriormente más esta sentencia, tenemos actualmente una credibilidad”, expresó a la emisora 780 AM.
Agregó que para el país era importante limpiar todo lo relacionado a este caso que estaba pendiente desde hace 27 años.
Paraguay logró un triunfo jurídico, mediante fallo a favor para no pagar la deuda espuria del excónsul honorario en Suiza. Una jueza norteamericana le dio la razón en una demanda entablada por la aseguradora SACE.
La jueza federal del distrito de Columbia, Washington DC, Ketanji Brown Jackson, dictó ayer una sentencia, haciendo lugar a la defensa del Estado paraguayo y rechazando la demanda iniciada en los Estados Unidos contra nuestro país por la empresa aseguradora italiana SACE.
Era en virtud de la cesión de derechos que le habían otorgado los bancos suizos relacionados al caso conocido como Gramont Berres.
Con esto, se dejará de abonar más de USD 100 millones, que la aseguradora italiana reclamaba para sí, aunque se aclara que el fallo es apelable ante la Corte de Apelaciones del distrito de Columbia.
El Ejecutivo afirma en el comunicado que asumió la defensa del Estado paraguayo en el caso Gramont con la mayor dedicación; incluso convocando a una cumbre de los tres poderes del Estado para sentar una política común. “