Luego de un par de horas de tensión y negociación, los campesinos que tenían previsto marchar en la mañana de este martes decidieron volver a la Plaza de Armas, frente a la sede del Congreso Nacional.
Un ambiente tenso se registró desde las 8.20 cuando los labriegos se disponían a movilizarse por las principales calles del microcentro de Asunción. La Policía Nacional les exigió que se movilicen sin sus simbólicos palos.
Hubo un intento de negociación que no prosperó y las organizaciones campesinas no accedieron al pedido de los uniformados. Se quedaron parados sobre la calle Paraguayo Independiente realizando discursos contra el Gobierno Nacional.
La institución policial conformó un fuerte dispositivo de seguridad en toda el área con presencia de los antimotines, la montada y un carro hidrante.
“Ni un centímetro vamos a violentar el derecho a terceros, pero tampoco vamos a ceder en nuestros derechos”, expresó el dirigente campesinos Luis Aguayo, uno de los representantes de la Coordinadora Nacional Intersectorial (CNI).
Los campesinos están instalados desde hace 30 días en la Plaza de Armas, ubicada frente a la sede legislativa, con la intención de lograr una respuesta a su problema económico, teniendo en cuenta la difícil situación en el campo a raíz de las inundaciones y las últimas heladas.
El Congreso Nacional había sancionado el proyecto que subsidia sus deudas, pero fue vetado en su totalidad por el presidente Horacio Cartes. Ahora en el Senado se debe ratificar en la aprobación inicial o aceptar la objeción del Ejecutivo.