A la decepción de los estudiantes por el nuevo rechazo a la intervención de la Fiuna por parte del Consejo Superior Universitario, le siguieron incidentes en el campus universitario en horas de la noche.
María Teresa Talavera, madre del dirigente estudiantil Raúl Benítez, denunció que un grupo de funcionarios alcoholizados que responden al decano Éver Cabrera ingresaron a la zona de campamento de los estudiantes que están en paro desde hace más de 100 días.
En el lugar comenzaron las discusiones, pero luego empezaron los golpes que afectaron a tres jóvenes, entre ellos Benítez. Cuando llegó la Policía, los hombres escaparon.
Al respecto, Talavera anunció que accionará judicialmente por las agresiones.
“Nosotros los padres responsabilizamos al rector (Abel Bernal), al vicerrector (Héctor Rojas) y al Consejo Superior Universitario de lo que está aconteciendo con nuestros hijos”, afirmó en comunicación con Radio Monumental.
Cabrera había accionado contra 10 estudiantes, entre ellos el hijo de Talavera. Los jóvenes tienen prohibido acercarse a la vivienda del decano, pero también sus funcionarios leales hicieron lo mismo.
La madre relató que las batucadas acompañadas con bombas a favor del decano son encabezadas por el hermano del director académico de la carrera de Ingeniería Civil, Paul Sarubbi y la esposa del ex decano, Isacio Vallejos.
“Lo que están enfrentando nuestros hijos que fueron a estudiar con todo el sacrificio y porque tienen el sueño de poner un párate en la Facultad de Ingeniería, es este el alto precio que están pagando, pero como las luchas son difíciles, hay que aceptar”, agregó.
Los estudiantes en paro lograron tener el apoyo de sus padres, a pesar de que en principio el deseo de los familiares es que culminen la carrera. Ahora la prioridad, de acuerdo con Talavera, es dejar una facultad más limpia y transparente. En este sentido, no les queda más que acompañar a sus hijos en su lucha.
Cabrera se desempeñaba como director del Instituto Nacional de Tecnología, Normalización y Metrología (INTN). Los estudiantes lo acusan de asignar cargos a funcionarios de esta institución en la Fiuna, para que lo respalden a cambio de este favor.
Además, denuncian que los miembros del Consejo Directivo de la Facultad lo apoyan porque el decano les consigue millonarias concesiones a través de convenios con el Estado.