Cuando visitamos a una persona enferma o de alguna manera necesitada hacemos el mundo más humano, nos acercamos al corazón del hombre, a la vez que derramamos sobre él la caridad de Cristo, que Él mismo pone en nuestro corazón.
La misericordia –afirma San Agustín– es ‘el lustre del alma’, pues la hace aparecer buena y hermosa y cubre la muchedumbre de los pecados, pues ‘el que comienza a compadecerse de la miseria de otro, empieza a abandonar el pecado’. Por eso es tan oportuno que nos acompañe ese amigo que tratamos de acercar a Dios cuando vamos a visitar a un enfermo.
El papa Francisco a propósito, de la lectura de hoy, dijo: “Jesús llama a sus discípulos y los envía dándoles reglas claras, precisas. Los desafía con una serie de actitudes, comportamientos que deben tener. Y no son pocas las veces que nos pueden parecer exageradas o absurdas; actitudes que serían más fáciles de leerlas simbólicamente o espiritualmente. Pero Jesús es bien claro”. No les dice: ‘Hagan como que…’ o ‘hagan lo que puedan’.
“Recordemos juntos esas recomendaciones: ‘No lleven para el camino más que un bastón; ni pan, ni alforja, ni dinero... permanezcan en la casa donde les den alojamiento’. Parecería algo imposible”.
“Podríamos concentrarnos en las palabras: ‘pan’, ‘dinero’, ‘alforja’, ‘bastón’, ‘sandalias’, ‘túnica’. Y es lícito. Pero me parece que hay una palabra clave, que podría pasar desapercibida frente a la contundencia de las que acabo de enumerar. Una palabra central en la espiritualidad cristiana, en la experiencia del discipulado: hospitalidad”.
“Jesús como buen maestro, pedagogo, los envía a vivir la hospitalidad. Les dice: ‘Permanezcan donde les den alojamiento’. Los envía a aprender una de las características fundamentales de la comunidad creyente. Podríamos decir que cristiano es aquel que aprendió a hospedar, aprendió a alojar”.
“Jesús no los envía como poderosos, como dueños, jefes o cargados de leyes, normas; por el contrario, les muestra que el camino del cristiano es simplemente transformar el corazón. El suyo, y ayudar a transformar el de los demás”.
(Frases extractadas de http://www.homiletica.org/francisfernandez/franciscofernandez0426.htm y https://es.catholic.net/op/articulos/6333/cat/331/no-tomeis-nada-para-el-camino.html#modal)