El sumo pontífice impartió la bendición Urbi et Orbi (“a la ciudad de Roma y al mundo entero”) desde el balcón de la Basílica de San Pedro, el pasado domingo durante la celebración de Pascua de Resurrección. Fue su última aparición en público en este año tan importante para la Iglesia Católica por el Jubileo.
La gente estuvo expectante de si aparecía o no el papa Francisco para dar su mensaje de Pascua, ya que no había confirmación.
Grande fue la sorpresa para los asistentes cuando, siendo las doce, el papa Francisco apareció en el balcón principal de la Basílica del Vaticano para dar un breve mensaje con una voz débil y visiblemente agotado: “Hermanos y hermanas, feliz Pascua”.
Seguidamente, pidió al maestro de ceremonia que lea su mensaje.
El Papa da la bendición 'Urbi et Orbi' en la Plaza de San Pedro a pesar de su delicado estado de salud pic.twitter.com/PXN17Ybf0f
— EL MUNDO (@elmundoes) April 20, 2025
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Fue su último discurso, en el cual pidió por la paz mundial, mencionando cada una de las guerras activas en distintos rincones del planeta. Además, realizó un llamado a la liberación de prisioneros, rehenes y presos políticos en Gaza e Israel, e instó al desarme global y a recuperar la confianza en que la paz “sigue siendo posible”.
El papa no quería faltar a esta gran fiesta para los católicos; pese a que seguía convaleciente asistió para dar su tradicional mensaje. El Pontífice se paseó en el papamóvil y hasta bendijo a un niño que estaba entre la multitud que se acercó hasta la Basílica.