Cuando dan las ocho de la noche suenan las sirenas en cada esquina del vecindario que tiene instalado como medida de seguridad. Pero ahora no es para alertar sobre algún incidente ni asalto, sino que es una invitación a los vecinos a salir a rezar el Ángelus, frente a sus casas, con la intención de generar esperanza en medio de tanta desolación por la pandemia de coronavirus. Lo hacen todos los días, desde el pasado martes, luego de que el Gobierno decretara el estado de emergencia sanitaria que obliga a la ciudadanía a permanecer en sus hogares en el horario comprendido entre las 20:00 a 04:00, para evitar la propagación de la enfermedad.
Son integrantes de la comisión vecinal Comunidad Segura del barrio Pitiantuta de Fernando de la Mora, Zona Sur. También son miembros -como catequistas- de la parroquia Santa Catalina de Siena. “Cada uno reza en su casa o en la vereda, sin aglomerarse. Cada familia en su vereda”, comenta Ysabel Irala de Cabrera, al señalar que seis sirenas se activan a las ocho y los vecinos salen a orar frente a sus casas en unas ocho cuadras a la redonda.
Rezan un Padre Nuestro, tres Ave María y un Gloria para pedir -dijo- por la salud de los médicos y enfermeras que trabajan por contener el Covid-19. Cuenta que ya se está replicando lo que iniciaron en comunidades de Ñemby y Villa Elisa. “Espero que se pueda replicar en todo el país y el mundo”, auguró.