En la tercera ocasión en la historia en la que los uruguayos participarán en el máximo certamen del deporte ovalado.
En un encuentro intenso y muy disputado, los Teros, como se conoce al combinado uruguayo, superaron la desventaja de un punto que trajeron del encuentro de ida de su eliminatoria disputado hace 15 días en tierras siberianas en donde perdieron por un ajustado 22-21.
El dominio en la melé, donde su superioridad fue avasalladora, la agresividad en el placaje, y la superioridad física en el tramo final del encuentro, donde lograron hacer la diferencia, fueron las claves del triunfo uruguayo, así como la puntería de su medio de apertura, Felipe Berchesi, que anotó 21 puntos con el pie para los suyos.
Además de esos tantos al pie, los uruguayos anotaron tres ensayos, a cargo de Joaquín Prada, Rodrigo Capó y Agustín Ormaechea, por dos de los rusos Ianushkin y Artemyev, que completaron su marcador con los puntos obtenidos por el apertura Kushnarev.
Sin sorpresas ni tácticas ni técnicas, Uruguay arrancó dominando, fuerte en el juego agrupado, y buscó avanzar amparada en su sólido paquete de delanteros, que sin embargo era sensiblemente más ligero que el ruso.
Rusia, también con su plan de juego buen claro, apostó por correr y abrir rápido el balón a las alas en el juego abierto, lo que causó problemas a la defensa uruguaya, obligada a recolocarse constantemente y que solo pudo apelar a su agresividad en el contacto para parar a los europeos.
La primera mitad transcurrió en un toma y daca de golpes de castigo y ventajas y contraventajas en el marcador para uno y otro lado, con un dominio territorial y de posesión de los locales, a los que sin embargo les costaba anotar puntos más que a los rusos.
Ese problema se hizo evidente en los últimos 10 minutos del primer tiempo, cuando Uruguay, con un jugador más tras la expulsión temporal de uno de sus pilares por reiteradas infracciones en la melé, no solo no aumentó su caudal de puntos, sino que vio como Rusia anotaba el primer ensayo del encuentro al borde del descanso.
Rusia llegó a ampliar su ventaja a 8 puntos (12-20) al inicio de la segunda mitad, pero allí empezó a notarse la mayor iniciativa y frescura uruguaya, que comenzaron la remontada con un sensacional ensayo de Prada tras una muy buena jugada a la mano de toda la línea.
Poco después, esta vez gracias al trabajo cerrado de la delantera local, llegó el segundo ensayo uruguayo y la eliminatoria cobró un claro color celeste.
Los rusos notaron la presión, y comenzaron los errores de manejo y de concentración, que Uruguay aprovechó para abrir un mayor margen, esta vez gracias al medio melé Ormaechea.
Rusia intentó reaccionar, pero ya era tarde.
Pese a lograr un segundo ensayo con falta de 5 minutos de juego y ponerse a tiro para ir al Mundial, la reacción ya era demasiado tardía.
El apertura Berchesi aprovechó su último disparo a palos en una tarde impecable y puso a Uruguay a nueve puntos con el tiempo casi cumplido, y con ellos a los Teros en el Mundial de Inglaterra.