SoCAVAR LA DEMOCRACIA. En un texto de 45 páginas publicado el martes, el fiscal Smith lo acusa de socavar los cimientos de la democracia estadounidense al intentar alterar el conteo de votos en las presidenciales, una inculpación inédita y especialmente grave dado que en aquel entonces Trump era presidente en ejercicio.
La fiscalía afirma que actuó con otras seis personas, a las que no cita.
Antes de su comparecencia histórica, Trump acusó a su rival, el presidente demócrata Joe Biden, con quien podría volver a medirse en las urnas el año que viene, de haber ordenado al departamento de Justicia que le atribuya “tantos delitos como se puedan inventar” y de “instrumentalización sin precedentes de la ‘Justicia”.
La jueza lo contradijo este jueves. “Puedo garantizarles a todos que habrá un proceso justo y un juicio justo”, dijo. Tras esta vista preliminar el caso pasa a la jueza federal Tanya Chutkan, quien ya falló contra él en 2021.
La corte federal se halla cerca del Capitolio, sede del Congreso de EEUU, que fue asaltada por partidarios de Trump el 6 de enero de 2021 en su afán por impedir que se certificara la victoria de Biden.
El asalto fue “alentado por las mentiras” que el acusado contó durante meses sobre el presunto fraude electoral a favor de Joe Biden, dijo el fiscal Smith tras hacer pública la inculpación.
No es la primera inculpación penal contra Trump, pero las otras dos, dictadas contra él este año, una por fraude contable debido al pago de dinero a una actriz porno para comprar su silencio y otra por haber puesto en peligro la seguridad nacional con el manejo negligente de documentos confidenciales, corresponden a un periodo anterior y posterior a su mandato.
A él no parecen asustarle.
“¡Necesito una inculpación más para garantizar mi elección!” en 2024, sostuvo desafiante, en su red social. “Pronto, en 2024, será nuestro turno”, vaticinó. E insistió por enésima vez, sin pruebas, que las elecciones de 2020, que ganó Biden, fueron “corruptas, amañadas y robadas”.
El fiscal declaró el martes que quiere “un juicio sin demora”, de modo que podría coincidir con la campaña por las elecciones presidenciales de 2024, y quizá con Trump como candidato. Al día de hoy es el claro favorito para las primarias republicanas.
Por el momento, se desconoce el impacto de la nueva inculpación en su candidatura.