El líder brasileño de 70 años pasó sigue sin fecha prevista de alta, indicó el hospital, cinco semanas después de que la Corte Suprema decidiera enjuiciarlo por un presunto intento de golpe de Estado en 2022.
El ex mandatario (2019-2022) fue operado durante 12 horas para solucionar una obstrucción intestinal, una complicación derivada de una puñalada que sufrió durante un acto de su campaña electoral en 2018.
Bolsonaro se encuentra “con presión arterial controlada” y muestra una “mejora progresiva de los movimientos intestinales espontáneos”, detalló la clínica privada DF Star en un boletín.
La semana pasada, el ex presidente se enfureció ante la visita al centro médico de una funcionaria judicial para entregarle una notificación de la Corte Suprema, que a fines de marzo decidió enviarlo a juicio por una supuesta trama golpista.
La fiscalía acusa a Bolsonaro de haber liderado un complot para impedir la asunción del presidente Lula da Silva, luego de que lo derrotara en las elecciones de 2022.
De ser hallado culpable, podría recibir hasta 40 años de cárcel. Bolsonaro se declara inocente y dice ser un “perseguido”.
“¿Usted es consciente de que está dentro de una unidad de terapia intensiva?”, le espetó Bolsonaro a la funcionaria, en un video difundido en X. El día anterior, Bolsonaro apareció durante casi una hora en una transmisión en vivo de YouTube.
La corte consideró entonces que su participación demostraba la posibilidad de ser citado y notificado.
Un día después de la visita judicial, Bolsonaro sufrió un “empeoramiento clínico”.
Bolsonaro está inhabilitado electoralmente hasta 2030 por haber cuestionado sin pruebas la fiabilidad del sistema de votación brasileño. AFP