Empezar de nuevo, endeudados, con muchos compromisos, incógnitas y miedos, pero con la necesidad extrema de levantar cabeza como sea, es el gran desafío que emprende Ciudad del Este camino de su añorada reactivación, con la reapertura del Puente de la Amistad, que debe darse en un plazo no mayor al 15 de octubre, conscientes de que no será fácil y recuperarse plenamente tomará su tiempo.
“En general, todos estamos muy expectantes, por más de que muchos estemos todavía con miedo de que con los turistas de más lejos venga también un nuevo contagio, o una nueva ola, como se dice, porque con la gente de Foz de Yguazú (Brasil), prácticamente estamos en la misma situación”, analiza la empresaria Natalia Ramírez Chan.
Refirió que ya está trabajando para ver la forma de traer novedades, como tiene acostumbrados a sus clientes. Todas las tiendas de Ciudad del Este se caracterizan porque siempre están a la vanguardia. “Luego de estos siete meses que estuvimos parados, vamos a tener que hacer una tarea grande para poder reconquistar a nuestro público”.
De hecho, como las ventas fueron mínimas en todo este tiempo, aún después de que se haya autorizado la apertura de los locales, hay bastante mercadería en depósito. “Pero así también mucha gente no hizo ni una sola importación, entonces muchos estarán como yo, pensando ahora cómo van a hacer para traer las nuevas tendencias”.
DESAFÍO. Ramírez comentó que la operación requerirá una inversión de capital que realmente está muy golpeada. “Muchos usaron todo su recurso para poder sobrevivir todos estos siete meses sin trabajo, para mantener su empresa, pagar salarios que tuvieron que pagar igual. Algunos igualmente siguieron pagando sus alquileres, aunque todos se ayudan, pero igual hay gastos, comiendo lo que uno tiene de reserva”.
Sin duda, la empresaria aseguró que volver a empezar en las actuales condiciones será todo un desafío. “Hay que hacer un esfuerzo. Porque nuestro Gobierno, como sabemos, en toda la pandemia, hizo varias reuniones y en ninguno de los casos se concretaron los pedidos que hicieron los comerciantes”.
Aseguró que hay conciencia de que la reactivación de la economía de Ciudad del Este será lenta, que las ventas no serán las mismas como antes de la pandemia, pero la empresaria recuerda que en Brasil hay mucha gente que vive de este negocio.
“Sabemos que va a ser una reactivación lenta, que es difícil que las personas se lancen a venir a comprar, pero así también hay un grupo de personas que están pendientes de la apertura del puente, porque también es su subsistencia, su forma de ganarse la vida de comprar mercaderías en Paraguay y llevar al Brasil”.
Por otra parte, trabajadores taxistas, mototaxistas y transporte alternativo, sector que aglutina a más de cinco mil personas, decidieron en asamblea que si para el 15 de octubre no se normaliza el paso entre Ciudad del este y Foz irán al paro.
Plantean que se trabaje en cumplimiento de protocolo
Con una circulación más restringida, la posibilidad de una segunda oleada de Covid-19 es menor, pero se llegó al momento en que hay que trabajar, con todos los cuidados. “Bueno, tenemos que elegir ya el trabajo con los cuidados, cumpliendo los protocolos, exigiendo su cumplimento a la gente con quienes tenemos una relación más cercana, como proveedores, aunque sea difícil pedirle a una persona que no aprendió en siete meses de encierro que tiene que cuidarse”, refirió Natalia Ramírez Chan.
Dijo que además de no querer enfermarse está todavía pendiente el cómo se va a trabajar dentro del shopping, sobre el cual, hay preocupación.