El Ministerio de Agricultura, Ganadería y Abastecimiento de Brasil emitió ayer una circular por la cual informa que a partir de este viernes todas las operaciones que fueron temporalmente trasladadas a Foz de Yguazú volverán a funcionar en las dependencias de los puertos Algesa y Campestre, en el lado paraguayo. Esto significa que retornan los inspectores brasileños a Ciudad del Este para verificar los camiones con materia prima, requisito previo para cruzar la frontera y para que las exportaciones paraguayas lleguen a destino.
Los funcionarios que desde principios de año reducían el ritmo de las verificaciones, como medida de presión para mejorar sus condiciones laborales, agudizaron su protesta el viernes de la semana pasada, cuando decidieron retirarse de las áreas de control integrado que funcionan en la margen paraguaya.
Con esta decisión se agravó la congestión en la zona fronteriza con más de 30.000 toneladas de soja, arroz y trigo que quedaron varadas en los estacionamientos de camiones.
El presidente de la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas, César Jure, mencionó que ya se cumplió con la mayoría de las condiciones que contemplan algunas mejoras de las instalaciones, garantía de seguridad ante la agresión registrada por parte de un camionero, mientras que aún está pendiente el protocolo de control de insecticidas.
Resolución. Sobre el último punto, el titular del Servicio Nacional de Calidad y Sanidad Vegetal y de Semillas, Rodrigo González, explicó que el aspecto técnico del documento se terminó ayer, en tanto que hoy pasa por el área jurídica antes de publicarse la resolución correspondiente.
El protocolo establece controles más estrictos y sanciones por el uso de insecticidas para el control de plagas en los camiones.
Los inspectores fitosanitarios brasileños retornan hoy al territorio paraguayo luego de una semana de tensiones. En Ciudad del Este aguardan centenares de camiones para cruzar la frontera.