Unas 6.132 cuentas corrientes fueron inhabilitadas entre enero y agosto de este año, lo que representa un incremento de 41% en relación con el mismo periodo del 2011. El dato es uno más de los que van saltando en mercado, los cuales avalan que el nivel de sobreendeudamiento de la población está cobrando víctimas.
Al cierre de junio, el Banco Central registró unas 788.291 cuentas corrientes en el sistema financiero, lo que refiere que alrededor del 1% de las cuentas corrientes del sistema financiero son las afectadas. En porcentajes, la cifra es ínfima, pero la tendencia es que el número siga creciendo.
Las estadísticas de la firma Informconf reflejan que también en este índice puede notarse la caída de la economía este año, considerando que en 2011, recién en noviembre se registraron 6.528 cuentas suspendidas. De continuar este camino, para diciembre se proyectan más de 10.500 cuentas en esta situación, según las proyecciones boureau (analista) de crédito.
Ya en enero de este año se registraron 747 cuentas cerradas por la administración bancaria, mientras que en el 2011 se había registrado un cierre de 485 y en 2010 solo 265 casos.
El año anterior se cerraron 7.468 cuentas y en 2010, 4.342, denotando ya la desaceleración que comenzó hacia finales de 2011 y se recrudeció a inicios de 2012.