San Jerónimo encuadra perfectamente en el concepto de “exótico” que espera el turista de estas latitudes, ya que se erige sobre rocas en la ribera del río Paraguay, en un punto neurálgico entre el microcentro, la zona portuaria de Asunción y el residencial barrio Sajonia.
La casa de don Andrés Echagüe y doña Graciela Coronel de Echagüe sirve como centro de información para los visitantes que son recibidos con gran calidez.
Andrés Echagüe cuenta a ULTIMAHORA.COM que la idea de explotar culturalmente al barrio cobra fuerza desde el 2002 cuando se desempeñaba como presidente de la comisión vecinal.
En esos tiempos, San Jerónimo recibía la visita de arquitectos, fotógrafos y alguno que otro artista en búsqueda de inspiración. Incluso cuenta que por sus pasillos caminó el genio de Emiliano R. Fernández.
El poblador cuenta que el nacimiento del sitio fue accidental, debido a que los trabajadores de la flota mercante y varios pescadores decidieron edificar sus primeras casas de adobe en la colina de piedras, denominada “La Tosca”, para evitar el calvario de la crecida del río Paraguay.
Ya en 1926 se funda el club y se construye el oratorio, dos edificaciones que delinearían definitivamente la personalidad de San Jerónimo.
Recorrer los recovecos y calles del barrio es una experiencia particular, ya que los colores vivos de las casas contrastan completamente con el gris de la gran ciudad que mucho tiempo le dio la espalda.
Doña Graciela relata con una sonrisa en el rostro que existe un fuerte sentido de pertenencia entre los pobladores. “Acá nos conocemos todos”, afirma.
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Prosigue comentando que la inseguridad se redujo bastante gracias al fuerte control de la comisión vecinal y se alegra porque, poco a poco, su querido barrio va dejando atrás las páginas de las crónicas policiales.
“La gente que tiene ganas de delinquir y consume drogas sabe que acá no tiene cabida”, menciona.
<h2>Actividades</h2>
Luego de la inauguración oficial de las mejoras que se llevaron a cabo con el apoyo de la Senatur, las ferias de artesanías y gastronomía se realizarán los primeros sábados de cada mes.
No obstante, para los interesados, la familia Echagüe organiza un recorrido por San Jerónimo que comprende una parada obligatoria en la “Casa del Pescado”, donde el visitante podrá deleitarse con los diversos platos preparados con el alimento básico de los pescadores, primeros habitantes del lugar.
El Cocido Literario se convertirá en la opción predilecta para quienes deseen sumergirse en la tinta de los mejores autores paraguayos con el dulce aroma del tradicional “cocido quemado”, preparado por doña Ruth Sánchez, quien utiliza su propia yerba en la que mezcla la esencia de los naranjos, el eucalipto y un “ingrediente secreto” que lo vuelve irresistible al paladar.
Los libros correrán por cuenta de la librería Quijote, y su inauguración sería el próximo sábado 13 de abril.
Y para los amantes de la música, este lunes 8 de abril se inaugurará el “pasaje día y medio” en honor al disco de la artista paraguaya Berta Rojas, nominado a los premios Grammy en el 2012. Incluso, se prevé la presencia de la pródiga guitarrista para la habilitación oficial.
Luego de concluir el recorrido por San Jerónimo, el forastero se arrepiente de no haber recalado antes. Pero nunca es tarde para acercarse, admirarlo, sentirlo y, sobretodo, disfrutarlo...