El Aborigen, que venía de ganar sus dos últimos partidos en el campeonato, volvió a caer en el déficit ofensivo, que lo tuvo a maltraer en las primeras fechas.
Trámite. Los repolleros arrancaron como protagonistas, generando las primeras ocasiones de peligro, tratando de abrir espacios por ambos bandos, con Julio Enciso y Lorenzo Melgarejo como encargados principales en la distribución ofensiva.
De a poco los aborígenes comenzaron a ganar espacios, especialmente en el mediocampo con recuperaciones limpias de Jorge Mendoza y de ahí en más Josué Colmán y Matías Segovia con velocidad llegaban a inquietar a la portería de Martín Silva. El defensor colombiano Daniel Bocanegra estuvo impreciso durante los primeros 45’.
Complementaria. Volvió a mostrar a dos equipos con la intención de ganar, trabado en el mediocampo, hasta casi la mitad de tiempo de juego de la etapa complementaria. Pero gracias a la pelota parada, el Guma llegó al tanto que desequilibró el clásico. Julio Enciso envió el tiro de esquina que Tacuara Cardozo, acostumbrado a esto, logró conectar y echar toda la labor defensiva legendaria.
El tanto en contra obligó a Guaraní a buscar la igualdad; el DT Jubero apostó a variantes. La estrategia tuvo en contrapartida dejar espacios que los volvió a aprovechar el repollero. A poco del final y gracias a una excelente acción de Hernesto Caballero, destacado en Libertad, asistió a Julio Enciso para el segundo tanto final.
El Guma sigue invicto en el Apertura. Ayer consiguió su sexta victoria, la tercera al hilo.
A levantar cabeza
Jorge Mendoza, el mediocampista de Guaraní, uno de los más destacados, realizó su análisis del encuentro: “Fue un partido muy parejo, muy correcto. A mi criterio la pelota parada definió el partido”.
Por otra parte, Mendoza lamentó la derrota aborigen y mencionó que “es una lástima; veníamos de dos victorias seguidas y queríamos reivindicarnos con nuestro público que vino a dar su apoyo. Ahora nos toca levantar la cabeza y seguir trabajando”.