“La ministra quiere justificar su ley perversa del empleo parcial, diciendo públicamente que generó más empleo formal, mientras ella misma se contradice al reconocer que migraron de un contrato a otro. Y además, según el último informe estatal –de la Dirección General de Estadística, Encuestas y Censos (Dgeec)– en el último semestre de 2018 y al inicio del 2019 aumentó a 5.000 (la cantidad de) las trabajadoras y trabajadores desocupados, sumando 250.000”, detalló Eduardo Ojeda, de la CSC.
“Además, la ministra Carla Bacigalupo no dice que en el país hay más de 2.000.000 de trabajadores en el trabajo informal, que no llegan siquiera a ganar el sueldo mínimo”, agregó Ojeda.
La CSC señaló también que “Bacigalupo habla de fiscalización, mientras los obreros mueren de manera violenta, triturados por una máquina, en accidentes laborales que pudieran evitarse si hubiera una política de Estado y en especial si el Ministerio de Trabajo garantizara el respeto a los derechos laborales. El patrón corrupto y explotador goza de impunidad”, lamentó.