13 dic. 2025

Prevén una cumbre de FAO con pocos logros

Más de 60 jefes de Estado y de Gobierno debatirán, en la Cumbre de Roma, sobre la “inmensa tragedia” de los mil millones de humanos que sufren hambre, donde brillarán por su ausencia casi todos los dirigentes del G8.

Por Silvia Aloisi, de REUTERS

ROMA, ITALIA

La Cumbre Mundial de Alimentos organizada por la ONU y que se realizará la próxima semana tiene pocas probabilidades de lograr avances en la lucha contra el hambre, ya que los líderes se han mostrado comprometidos con un aumento en la ayuda agrícola a países pobres, pero sin establecer metas o plazos para acciones.

Ante la realidad de que más de 1.000 millones de personas sufren de hambre, la Organización para la Agricultura y la Alimentación (FAO, por su sigla en inglés), perteneciente a Naciones Unidas, hizo un llamado para celebrar una cumbre en Roma entre el 16 y el 18 de noviembre.

La ONU esperaba conseguir fuertes promesas de líderes mundiales para gastar 44.000 millones de dólares anualmente en ayuda alimentaria a países pobres.

Sin embargo, el borrador de una declaración final sólo incluye un compromiso general a invertir más dinero en desarrollo agrícola y no hace mención a una propuesta para eliminar el hambre para el 2025.

“Nos comprometemos a tomar acciones hacia la erradicación sostenida de la hambruna en la fecha más pronta posible”, indica el borrador, que sería aprobado el primer día de la cumbre de Roma, a menos que sufra modificaciones de último minuto.

LA DECLARACIÓN. Grupos de asistencia dijeron que la cumbre, a la cual muy pocos líderes pertenecientes al G8 o ninguno de ellos asistiría, ya parece una oportunidad desperdiciada.

“La declaración es simplemente una repetición de viejas declaraciones”, comentó Francisco Sarmento, coordinador de derechos alimentarios de ActionAid.

La escasez de alimentos y la desnutrición cobraron nueva importancia política después de que el año pasado un aumento en el precio de los alimentos provocara disturbios en cerca de 60 países.

Una cumbre del G8 prometió 20.000 millones de dólares durante un plazo de tres años para ayudar a granjeros en naciones pobres, en un importante cambio en la política, que se aleja de la solución a emergencias puntuales y busca desarrollar estrategias a más largo plazo.

La FAO esperaba continuar con este espíritu y que los líderes se comprometieran a aumentar el porcentaje oficial de asistencia en agricultura a un 17%, volviendo a los niveles de 1980, desde el 5% actual.

Tal decisión recaudaría aproximadamente 44.000 millones de dólares anuales, en vez de los 7.900 que se gastan actualmente.

LA PRESENCIA PARAGUAYA

La delegación paraguaya a la Asamblea de la FAO, en Roma, Italia, será encabezada por el ministro de Agricultura y Ganadería, Enzo Cardozo, quien participará de todas las deliberaciones del organismo dependiente de las Naciones Unidas.

A ello habría que añadir el viaje del presidente, Fernando Lugo, quien igualmente viaja a Italia para asistir a la apertura de las deliberaciones de Cumbre Mundial sobre Seguridad Alimentaria. De acuerdo a lo informado, Paraguay hará una exposición sobre las políticas que ejecuta su Gobierno para enfrentar el hambre.

Lugo compartirá “la visión sobre las estrategias consideradas como más convenientes por el Paraguay para actuar en el concierto de las naciones”, ya que este país considera la crisis alimentaria “un serio riesgo para la paz y la seguridad mundiales” y que se requiere de consensos “rápidos” para combatir el hambre.