Un 70% de la cocaína se elabora con precursores químicos procedentes de China, explicó. “No hay trafico de cocaína, sin tráfico de precursores químicos chinos”, dijo. Pero esto también es un peligro porque, además de la cocaína, se verifica un preocupante desarrollo de drogas químicas que vienen también de precursores de procedencia china”, añadió.
Citó el caso los Estados Unidos donde hay un aumentó considerable de drogas químicas como el Fentanilo, “que ha causado más de 120.000 muertos el año pasado, y va bajando el consumo de cocaína, que va a Europa”.
Con China, resaltó, se tiene además el problema de que una ciudad como Hong Kong se ha constituido en una plataforma de blanqueo o lavado de dinero a nivel internacional. Dijo que ninguna demanda o investigación judicial vinculado con el tema prospera en Hong Kong. Todos los sistemas internacionales, como EuroJusticia, no reciben respuesta por parte de Hong Kong.
Este problema no es solo de Europa, resaltó. “Estuve en Washington en marzo, y conocí al ministro de Justicia americano que me dijo que ellos también, no tienen respuesta. Entonces hay un problema alrededor de ellos. No es solo el problema del narcotráfico. Tiene que ver con todo el crimen organizado”.
El problema es, dijo, que cuando vemos, por ejemplo, inversiones que vienen de China, “cómo podemos estar seguros de que ese dinero no proviene del narcotráfico o de cualquier otro tráfico. Eso va a ser un problema mayor que vamos a tener que enfrentar”, afirmó. Otro dato que resaltó es que hay una relación entre el narcotráfico y el tráfico de personas. Y hoy, de la explotación de minas ilegales “porque el oro también es una manera de lavar el dinero del narcotráfico”.