AFP
BUENOS AIRES - ARGENTINA
El peso argentino cayó ayer 3,36% a 41,94 por dólar, y sumó en dos días una pérdida de 5,94%, luego de que el FMI aceptó ampliar a 57.100 millones de dólares un crédito para estabilizar la economía.
Con este cierre, la moneda perdió 9,44% en el mes de setiembre y acumula en el año una depreciación de 55,34%. Argentina obtuvo en junio un préstamo por 50.000 millones de dólares a 3 años de parte del Fondo Monetario Internacional (FMI), pero tuvo que renegociar el acuerdo por incumplimientos de metas y nuevas corridas cambiarias.
Una de las nuevas medidas acordadas fue establecer un sistema de bandas de flotación, que entrará en vigor el 1 de octubre, y en ascenso paulatino hasta fin de año a razón de un 3% mensual.
A partir del lunes, la fluctuación oficial del tipo de cambio deberá situarse entre 34 y 44 pesos por dólar.
El Banco Central permitirá la libre flotación del peso dentro de esta zona. En el caso de que el tipo de cambio se encuentre por encima de la zona de no intervención, el BCRA realizará ventas diarias de moneda extranjera por hasta 150 millones de dólares, dijo la entidad monetaria.
El encargado de poner en marcha el nuevo marco por el que se compromete al crecimiento nulo de la base monetaria es un Comité de Política Monetaria, liderado Guido Sandleris, nombrado el martes como presidente del Banco Central tras la abrupta salida de Luis Caputo.
CIERRE DE MERCADOS. Los mercados financieros de Argentina cerraron con bajas generalizadas ayer ante una marcada cautela inversora pese al acuerdo crediticio firmado esta semana con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y nuevas medidas anunciadas por el banco central para ofrecer tranquilidad.
El riesgo país argentino medido por el banco JP Morgan subía 29 unidades a 623 puntos básicos a las 17.00 local.
“Las dudas siguen sobrevolando el plan económico del Gobierno pese al acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), los nuevos anuncios del BCRA y el discurso que dio el presidente el día del jueves, donde aclaró que los nuevos datos de pobreza reflejan las turbulencias y las dificultades que estamos atravesando”, dijo la consultora Portfolio Personal.
“Tuvimos otra rueda con una sostenida demanda (de dólares), más allá de los limitados volúmenes, que dispara al dólar mayorista aún cuando el BCRA volvió a impulsar ventas en los futuros”, dijo Gustavo Ber, economista de Estudio Ber. Añadió que la nueva política cambiaria de bandas de flotación aún despierta un sesgo alcista por parte de los operadores.
