Pedro Loblein, presidente del Instituto Nacional de Cooperativismo (Incoop), expresó que el sector cooperativo observa con preocupación el artículo 103 del proyecto de ley de servicios de confianza para las transacciones electrónicas y otros, que se encuentra actualmente en instancia del Poder Ejecutivo.
El titular de la institución reguladora de las entidades solidarias aseguró que el apartado en cuestión puede tener un impacto negativo en las operaciones de las cooperativas de ahorro y crédito, y en la mayor parte de los socios de las mismas. “Todo el sector está preocupado, nosotros también como Incoop, porque sí vemos que va a afectar”, manifestó.
Puntualmente, Loblein consideró que el requerimiento del nivel de seguridad alto para la identificación electrónica, que se establece en el artículo 103 para operaciones del ámbito financiero, se traducirá en mayores costos y que esto, además, tendrá su efecto en el proceso de aumento de las transacciones electrónicas y la inclusión financiera.
“Vemos que con esto mínimamente va a haber un retroceso, se puede encarecer el servicio. La ley en general está bien, el artículo 103 es el que nos preocupa, porque es muy rígido”, indicó. Agregó que las dificultades difícilmente puedan enfrentarse con la reglamentación, en caso de que la norma sea promulgada como está redactada hoy en día.
La misma postura expresada por Pedro Loblein fue transmitida por la Confederación Paraguaya de Cooperativas (Conpacoop), gremio que remitió una nota oficial a Mario Abdo Benítez, presidente de la República, el 5 de octubre pasado, en la que solicita el veto parcial del proyecto de ley.
versiones. Durante su estudio en el Congreso Nacional, el artículo 103 contaba con dos versiones: una, de Diputados, que establecía el nivel de seguridad elevado en materia de identificación para todas las operaciones financieras; y otra, que dejaba al ente regulador la posibilidad de determinar los niveles de seguridad conforme a los riesgos de cada segmento.
La versión sancionada por los parlamentarios fue la primera. Cabe recordar que otro sector que expresó su preocupación al respecto fue el de las telefónicas, cuyos representantes consideran que el apartado 103 provocaría un fuerte desincentivo para la utilización de las billeteras electrónicas y los giros.
Por su parte, la Asociación de Bancos (Asobán) solicitó a Mario Abdo Benítez la promulgación de citada ley, incluido el artículo 103.