La madre explicó que estuvieron con problemas de salud, pero ahora volvieron para seguir con su medida de fuerza frente al acceso principal de la sede judicial de Asunción.
Explicaron que ahora se debe sortear un nuevo Tribunal de Apelación que estudie los recursos de la Fiscalía, la querella y las dos defensas de las procesadas.
En el caso, en un segundo juicio oral, la odontóloga Lilia Espinoza y la bioquímica Sandra Hermosa recibieron penas de dos años y medio y dos años de encierro. En el primer juicio, habían tenido condenas de 4 y 3 años de cárcel, respectivamente.
La Sala Constitucional ya rechazó las acciones que fueron promovidas por las defensas de las condenadas, por lo que solo quedan los recursos de apelación en contra de la segunda sentencia.
En el caso, tanto la Fiscalía como la querella habían requerido las penas de 5 años de encierro, y otras medidas, pero el Tribunal de Sentencia estimó que, por el principio de la prohibición de la reforma en perjuicio, le aplicaron las citadas penas.