AFP
MONTEVIDEO, URUGUAY.
El gobierno uruguayo y la portuguesa Portucel firmaron los acuerdos para que la empresa papelera se instale en Uruguay, dijo ayer el presidente uruguayo Tabaré Vázquez en una entrevista con los corresponsales extranjeros.
“El acuerdo ya se firmó” hace unos días, dijo Vázquez, quien añadió que la empresa portuguesa confirmó que realizará una inversión en el país de entre 4.000 y 6.000 millones de dólares.
Esa inversión incluye una planta de celulosa y una de papel y, aunque aún no está definida su locación exacta, la misma será “en el este” del país, posiblemente cerca de la Laguna Merín (fronteriza con Brasil), señaló el mandatario.
Asimismo, la inversión incluye la construcción de un puerto de aguas profundas, aunque esto no será en el balneario de La Paloma (210 km al este de Montevideo), donde se había hablado de la posibilidad de construir un puerto de esas características.
La posibilidad de la instalación de Portucel en Uruguay se gestó tras una visita de Vázquez a Lisboa en setiembre de 2007.
Portucel estuvo evaluando la posibilidad de instalarse en Brasil o en Uruguay, y a la postre se decidió por este último.
Por otra parte, Vázquez dijo que su país mantuvo su soberanía en el conflicto con Argentina por la instalación de una planta de celulosa sobre un río limítrofe, que en un principio implicó el pago de altos costos.
“El costo mayor se pagó al inicio del conflicto”, dijo Vázquez en alusión a la disminución al flujo turístico y comercial con Argentina por el bloqueo de un puente por parte de ciudadanos argentinos contra la pastera de la finlandesa Botnia, que se instaló en Fray Bentos (300 km al noroeste de Montevideo), sobre el Río Uruguay, con una inversión de 1.000 millones de dólares.
CONTINÚA EL CIERRE. Ese puente, que une a la argentina de Gualeguaychú con Fray Bentos, permanece cortado desde hace casi tres años, mientras hubo cortes intermitentes en el paso entre la argentina Colón y la uruguaya Paysandú (400 km al noroeste de Montevideo), y ocasionalmente en el pasaje entre la argentina Concordia y la uruguaya Salto (500 km al noroeste).
“Era lo que había que hacer por principios y por soberanía”, porque “Uruguay no es una provincia de Argentina ni un estado de Brasil”, señaló Vázquez.
“En ese momento (2005) lo que llevaba invertido la empresa (Botnia) era mucho menor que el costo del corte del puente”, pero actualmente la pastera ya está produciendo y exportando, mientras se ha diversificado el turismo.