Sostuvo que el Paraguay en este momento está librando una batalla entre dos esquemas, por la pulseada entre el abdismo y el cartismo.
Ramírez estuvo presente, como miembro, durante la reunión reservada de la CBI con los titulares del BCP José Cantero, y el de la Seprelad, Carlos Arregui, ayer.
“En un momento, donde hoy se pretende instalar desde un sector que el sicariato del ex director del Penal es responsabilidad del gobierno”, cuestionó Ramírez.
“En el Paraguay se está librando una batalla entre dos esquemas, uno que defiende la democracia, y el otro que dirime sus diferencias a balazos, que busca comprar, amedrentar y destruir las instituciones”, manifestó.
“Creo que por eso es clave, fundamental el trabajo de la CBI. Vamos a recibir información importante que pueda colaborar con instituciones jurisdiccionales”, dijo.
“Cuál es el temor que la CBI estudie eso”, remarcó, en relación a las acusaciones de transferencias millonarias por parte de Horacio Cartes.
“Se habla de transferencias de un líder político a sus leales, o al entorno. Transferencias multimillonarias. No estamos hablando de transferencias para pagar cuotas de Netflix”, manifestó el diputado.
“Si se habla de peritaje, podríamos estar ante coincidencias en el momento de tratamiento de temas que podrían agredir un modelo de negocio, que se trataron en el Congreso”, consideró.
“La información de todo lo conversado con Arregui, lo vamos a pasar a través de un informe oficial”, aseguró.
“En su momento, tenemos que enfrentar muchos problemas. Quieren pintar contrabando como algo inofensivo. Es la ruta que permite que se abran otros negocios que operan bajo la violencia”, cuestionó el diputado.
“Quiero ratificarme en que no debe haber ningún temor sobre la investigación que se pueda hacer. ¿Qué significa transferencia de un líder a leales o cercanos? Transferencias millonarias”, insistió.
