24 jun. 2025

No hay pistas de los autores del asalto a funcionaria municipal

Redacción Regional

CIUDAD DEL ESTE

La Policía Nacional no tiene pista de los autores del violento asalto y robo, a mano armada, del que fuera víctima la funcionaria municipal Fanny Corvalán Núñez, jefa de la división Salubridad e Higiene de la Comuna local, ocurrido la noche del sábado en el barrio San José. Después del sorteo correspondiente en el Ministerio Público, el caso fue derivado a la unidad fiscal número 10 a cargo de Humberto Javier Rosseti, quien debe tomar declaración a la afectada en el transcurso de esta mañana.

“Hasta ahora no hay nada. En la comisaría está nuestra denuncia, el caso pasó a la Fiscalía, donde tengo que también ir a declarar, mas nada”, señaló Corvalán, quien junto a sus hijos se están recuperando de la triste experiencia que les tocó vivir. El suceso se registró el pasado sábado sobre la avenida San José de esta ciudad, cuando Corvalán estaba regresando con su familia de un acto escolar programado por la culminación del año lectivo. La víctima del atraco destacó que fueron ocasionales presas de los marginales que se estaban desplazando en un vehículo del tipo taxi, marca Toyota.

LA MANO DE DIOS. Significó que la mano de Dios intercedió para que no pasara nada a sus pequeños hijos y a los demás miembros de su familia que estaban con ella en el interior del vehículo de la marca Kia, tipo Picanto.

Agregó que los marginales, cuatro de ellos estaban en un vehículo de alquiler y otros dos en una motocicleta, atacaron para matar, a pesar de que imploraron para que actúen con prudencia a raíz de la presencia de niños dentro del rodado.

La funcionaria pública destacó que los marginales aparentemente estaban bajo los efectos de algún tipo de sustancia alucinógena. Es porque dispararon en contra de la humanidad de los ocupantes del rodado de la marca Kia.

Corvalán Núñez se encontraba en compañía de sus tres hijos menores de edad. Uno de 7 años, otro de 5 y una niña con apenas 2 años de edad. Todos ellos fueron testigos de la violencia de los marginales que atacaron sin ningún tipo de piedad y consideración.

La mujer destacó que su permanente comunicación con Dios obró el milagro, porque fueron minutos terroríficos que pasaron.

Los marginales actuaron como si fuera que estaban fuera de control.