En el ambicioso proyecto, junto a la hamaca se plantea la construcción de un área inclusiva con el propósito de dotar de un espacio recreativo para todos los chicos.
El objetivo de estos niños es que, a la hora de llevar a cabo alguna construcción, las autoridades o empresas privadas piensen en un ambiente adecuado para los niños con discapacidades.
Este grupo de robótica se denominó The Galáctico, es dirigido por la profesora Micaela Ocampos y se encuentra integrado por ocho alumnos del 4º, 5º y 6º grado del Colegio Privado Girasoles de la ciudad de Encarnación. Los estudiantes competirán en el Nacional de robótica que se inició ayer en Asunción, y que además forma parte de un gran certamen mundial y el ganador clasificará al Mundial de Robótica First Championship, a realizarse en Houston, EEUU.
“Nuestro proyecto en principio era una hamaca inclusiva en la Costanera de Encarnación y, al hacer entrevistas con arquitectos y demás, nos dimos cuenta de que eso iba a tener un costo muy elevado para nosotros, entonces decidimos hacer un prototipo de área inclusiva dentro del ejido de la Costanera. Esto, a fin de que sirva como ejemplo para que cada institución o entidad pública, a la hora de que quiera realizarse una plaza o demás, piense en los niños con discapacidades”, señaló la profesora Ocampos.
La educadora añadió que la idea general de esta área inclusiva es que las hamacas tengan tamaños adecuados para que se puedan subir las sillas de ruedas y que también se tengan a los costados las hamacas normales o tradicionales, para que todos los niños puedan jugar allí sin sentirse excluidos.
“Lo que nosotros presentamos es el prototipo de un área inclusiva a fin de que alguien o alguna institución lo pueda tener en cuenta a la hora de construir un espacio recreativo. Este proyecto es el aporte de estos chicos a la sociedad, donde se plantea la atención a una necesidad real para los chicos con discapacidades. Empezamos en agosto con este grupo de ocho chicos del colegio Girasoles, primero aportamos ideas y luego nos decidimos por este proyecto que consideramos muy importante para la ciudad”, señaló.
La responsable agregó que los niños hicieron todo el trabajo del proyecto e incluso las encuestas con la población estudiosa, donde se ha constado que efectivamente existe una gran cantidad de chicos con discapacidades que no cuentan con un área o espacio adecuado para ellos.
“Tenemos muchas expectativas en nuestro proyecto, porque consideramos varios aspectos en ello; no obstante, la idea es que vayan a divertirse, a más de competir, porque aprendieron mucho en este proceso”, concluyó.
Con este proyecto, los chicos encarnacenos demuestran una vez más que están muy consustanciados con la realidad y, en especial, en la atención de ciertas cuestiones que para muchos tal vez pasan desapercibidas, como el caso de los espacios o áreas inclusivas.
Días pasados destacábamos el proyecto de mangas de evacuación de otro grupo de robótica de Encarnación, y hoy es el turno de la hamaca inclusiva.