La ausencia de lluvias en el duodécimo departamento creó preocupación al sector de la producción. Ahora, renacen las esperanzas de la resiembra de productos para el consumo familiar. La producción de miel de abeja también sufrió el impacto climático y se tendrá merma en la producción final.
En el extremo sur en los distritos de Humaitá, Paso de Patria, General Díaz y Mayor Martínez, la ausencia de lluvias se sentía con intensidad, según Fidel Sosa, productor apícola de Loma Guazú (Gral. Díaz). Estas variaciones del clima causaron inquietud en los lugareños.
“Cultivos para consumo familiar ya están perdidos”, dijo Sosa, quien junto a otros se dedica a la producción de miel orgánica (certificada). Suscribió que el clima afectó con fuerza a la producción.
“En esta época nos dedicábamos a recolectar la última cosecha; pero con estas condiciones no se podrá realizar y tendremos merma”, remarcó.
Sosa resaltó que la miel que allí elaboran es un producto orgánico y ya traspasa las fronteras, por lo que eso es en un mercado que puede catapultar la producción local.
“Ñeembucú tiene las condiciones para este tipo de actividades; no tenemos la agricultura intensiva, ni el uso de agroquímicos. Este contexto nos da un escenario ideal para encarar esto”, afirmó.
El apicultor resaltó: “Lastimosamente, estos últimos años se adoptaron prácticas que dañan el ambiente como la quemazón de campos, que provocan daños irreparables”. JJB