Entre ellos estaban la camarista del Crimen Organizado, Claudia Criscioni, y la jueza de Ejecución, Sandra Kirchhofer, y el viceministro de la Seprelad, Pablo Rojas.
Ya en asuntos varios, el ministro Ríos señaló que “más allá de los vaivenes de ciertos programas de cooperación, es importante que sepa la ciudadanía paraguaya que el Poder Judicial, que esta Corte Suprema de Justicia, va a seguir impulsando esas políticas de combate al crimen organizado, al crimen transnacional”.
Añadió que a raíz de los nuevos acontecimientos geopolíticos, “hay que fortalecer las redes regionales de cooperación con países vecinos y continuar trabajando en la protección de los derechos fundamentales de las personas”, dijo Ríos.
Habló de que las naciones podían cortar las cooperaciones y si luego los restablecen iban a ser bienvenidas.
Por su parte, Carolina Llanes aclaró que toda la cooperación recibida no era una imposición contra la autonomía e independencia judicial, y que eran solo en ayuda técnica y académica. Además, que era normal con cambios de gobierno.