Nuevamente la mezcla de alcohol, música a alto volumen y carreras clandestinas convierten a la ruta Acceso Sur en un peligro para los demás usuarios.
Durante un control de vehículos sobre la mencionada ruta se produjeron varios incidentes, por parte de los conductores que se negaban a cooperar con las inspecciones que realizaban los agentes de la Policía Nacional y de la Patrulla Caminera.
Un joven fue detenido tras intentar agredir a un agente de la Caminera, pero luego quedó liberado nuevamente.
Los intervinientes retuvieron varios vehículos, en su mayoría motocicletas, debido a las faltas cometidas por sus conductores.
El operativo de control se realizó en horas de la madrugada, la entrada a la ciudad de Ñemby, en las inmediaciones de la discoteca Bora Bora, donde el mayor punto crítico se da en una estación de servicio, que es utilizada por los motociclistas y automovilistas como sitio de encuentro para consumir bebidas alcohólicas, haciendo sonar a alto volumen sus equipos de sonido.
Entre las faltas más destacadas nuevamente se encuentra la imprudencia de los conductores de subir al volante tras haber consumido algún tipo de bebida alcohólica. También se dieron casos de conductores que no contaban con los documentos y permisos requeridos para la circulación, entre otros.
descontrol. En la zona donde se realizó la inspección, existen varias denuncias de supuesta realización de carreras clandestinas realizadas por motociclistas, especialmente los fines de semanas.
Vecinos afirman que se trata de una zona liberada.