25 abr. 2024

Mesa Memoria Histórica dice que tierras de Marina Cué deben ser entregadas a campesinos

La Mesa Memoria Histórica, plataforma de organizaciones de la sociedad civil que agrupa a entidades de derechos humanos de víctimas y luchadores contra la dictadura y de gremios sindicales, celebró la decisión del Congreso de regularizar la tenencia de tierras en Marina Cué.

Curuguaty manifestación

Campesinos y pobladores de Marina Cué llevaron adelante años de lucha para conseguir las tierras.

Foto: Archivo ÚH.

Desde la Mesa Memoria Histórica consideraron que con la decisión del Congreso Nacional se saldó una deuda histórica de años de luchas y sacrificios de la comunidad campesina con relación a las tierras conocidas como Marina Cué, en el distrito de Curuguaty, Departamento de Canindeyú.

Igualmente, consideraron que dichas tierras fueron motivo de disputa por parte un poderoso grupo empresarial que se apoderó de las mismas de forma ilegal y no estando sujeto a la reforma agraria.

“Con la medida del Parlamento se puso fin a un largo conflicto social, por que lo es de esperar que el Poder Ejecutivo promulgue la ley a la brevedad, para que los integrantes de la comunidad puedan gozar de la seguridad jurídica y desarrollar su planes de producción y organización de la vida social”, remarcaron.

Nota relacionada: Kanonnikoff considera un “resarcimiento necesario” la transferencia de tierras de Marina Cué

Además, manifestaron la necesidad de que el Estado cumpla con su deber en el caso de las víctimas de violaciones de derechos humanos bajo la dictadura y el cumplimiento de las recomendaciones de la Comisión de Verdad y Justicia.

De la misma manera, aguardan que se cumpla el compromiso de dotar de los fondos necesarios a la Dirección de Reparación y Memoria del Ministerio de Justicia, para la búsqueda de los restos de alrededor de 500 desaparecidos bajo la dictadura.

Las tierras en cuestión permanecieron en litigio durante años, por la propiedad ubicada en la colonia Yvyra Pytã, ciudad de Curuguaty, más conocida como Marina Cué. Fue el lugar donde 11 campesinos y seis policías perdieron la vida tras un operativo irregular de desalojo el 15 de julio de 2012.

Aquella situación, conocida como la masacre de Curuguaty, enlutó al país y dejó huellas imborrables para decenas de familias paraguayas.

En la comunidad Marina Cué viven alrededor de 160 familias. Muchos de los pobladores son parientes de los fallecidos en la masacre y de los condenados por la muerte de policías.

Están ubicados en un margen fuera de la zona boscosa de la propiedad declarada por el Gobierno como la Reserva Natural Yvera. Marina Cué está prácticamente rodeada por cultivos de soja.

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