Para el presidente Mario Abdo Benítez, Paraguay es la envidia de la región y el mundo. Un día después de presentar ante el Congreso su primer informe de gestión, volvió a defender su administración y aseguró que todas las promesas de campaña se ajustarán a proyectos cuantificables, medibles y realizables.
Aseguró que cada discurso se podrá auditar para ver qué se cumplió y qué no. Fue durante la habilitación de la primera etapa de la planta alcoholera de Petropar en Mauricio José Troche.
“Como dije ayer (lunes) en el informe al Congreso, nosotros hicimos un proyecto realizable, medible y cuantificable. Cada discurso que he hecho, en cada rincón de la República del Paraguay cuando estaba en un proceso electoral, cuando acabemos nuestro mandato se va a poder auditar y mirar. Qué cumplimos y qué no cumplimos”, dijo.
Nuevamente reconoció que hay muchas deudas históricas que hay que saldar con el pueblo. “Hay enormes desafíos diariamente pero si nos unimos los paraguayos en torno a un propósito común, si recuperamos la autoestima de un país que no tiene que envidiar a nadie, porque Paraguay es hoy la envidia del mundo y la región”, indicó. Siguió afirmando que los paraguayos no tienen límites cuando se le da una oportunidad de trabajo.
Mencionó que durante seis meses hubo lluvia y no impidió que se pueda inaugurar la primera etapa de la planta de Troche. Vaticinó que durante los próximos años, seguirá teniendo desafíos y momentos difíciles. “Si estamos juntos, el Paraguay va a salir adelante, si reconciliamos a nuestra Nación, si entendemos que las diferencias naturales no nos deben impedir trazar un destino común”, significó.
EGOÍSMO político. Pidió a los líderes que sean realmente comprometidos y que se despojen de su egoísmo y que se pueda construir política seria. Pidió que no pretendan posicionarse políticamente a través de manipulación e irresponsabilidad.
“Desviarnos del verdadero compromiso que tienen que tener, quienes nos sentimos hoy representados genuinamente de un pueblo que no solamente votó, sino que depositó su fe a través del voto”, reflexionó.
Realizó promesas a los productores y aseguró que iniciarán el trabajo para asfaltar el tramo Corá Guasu hasta Walter Insfrán (Caaguazú). Además el tramo Itacurubí con Cerro Punta.
Felicitó y llenó de elogios a la presidenta de Petropar, Patricia Samudio, a quien calificó como “heredera de las mujeres residentas”.
El presidente de la República se trasladó hasta la localidad guaireña acompañado de su esposa, Silvana Adbo, y de algunos legisladores del departamento.
Fue un día después de presentar su primer informe anual ante el Congreso, por el que recibió varias críticas porque durante su exposición olvidó temas centrales como la situación de pobreza que golpea a más de un millón de paraguayos. Además del tema de inseguridad que afecta diariamente a la gente que sufre asaltos en manos de motochorros y en sus residencias.
Habló de obras que desarrollará a futuro, como la inversión en salud por USD 250 millones. Además del préstamo de USD 130 millones que será para el gobierno digital que apunta a la interconexión de las instituciones públicas.
El tema de la corrupción fue mencionado de paso, por el jefe de Estado, pero olvidó referirse al escándalo en el IPS que salpica a su hermano, Benigno López, quien está como ministro de Hacienda.