Por Javier Núñez Ferreira
CAAGUAZÚ
Restos de madera petrificada de hace millones de años son comercializados por personas que poseen estos elementos en sus fincas en la compañía Guavirá de la localidad de Caaguazú, en el quinto departamento. Estos restos de fósiles de madera fueron descubiertos alrededor de 10 años atrás en este distrito.
Mientras en otros países en que también existen troncos de árboles petrificados como la Argentina, Hungría, Estados Unidos, estos elementos están bajo el cuidado de los gobiernos. En nuestro país están prácticamente acabando debido a que no existe un programa de conservación.
Los pobladores de la compañía Guavirá encontraron esto como un negocio extra con el que hacen dinero vendiendo los restos fósiles a 500 guaraníes por kilo.
Mucha gente que conoce el verdadero valor de los trozos de madera petrificada llega hasta ese lugar a realizar compras de estos materiales que no cuentan con ningún tipo de restricción por parte de los gobiernos municipales, departamentales ni el Gobierno nacional.
En ese lugar se puede aún encontrar por las calles, y dentro de las propiedades enormes piezas de madera petrificada que son comercializadas por los lugareños.
La mayoría de los compradores de este producto, fabrica relojes, ceniceros y todo tipo de artículos de decoración con las piezas de fósiles de árboles.
Uno de los vecinos de Guavirá señaló que desde hace varios años, ciudadanos brasileños llegan a ese lugar con grandes vehículos a comprar los troncos y fragmentos de piedras para llevarlos al vecino país donde su valor se multiplica decenas de veces.
El Gobierno nacional no cuenta con un plan de conservación de estos elementos que son un patrimonio nacional. Este tipo de bloques existen en pocos países.
La madera petrificada es el resultado de un árbol que se volvió completamente piedra por el proceso de permineralización. Todos los materiales orgánicos fueron reemplazados por minerales, mientras conserva la estructura original de la madera.