Por Bruno Jara
ÑEEMBUCÚ
El algodón orgánico es la actividad alternativa que se impulsa en varias zonas para aprovechar oportunidades de negocios para un nicho específico. En un trabajo conjunto, productores públicos y privados desarrollan y fomentan el cultivo en Ñeembucú.
El costo de producción ronda los 1,5 millones de guaraníes, pero ello incluye la mano de obra. En plantaciones convencionales están las aplicaciones de agroquímicos. Todos estos gastos son absorbidos por el rubro orgánico, a lo que si se suma una buena productividad, la rentabilidad está asegurada para los algodoneros.
En la colonia Loma, distrito General Díaz, a 40 km de la capital departamental, Pilar, Marciano Torales es uno de los productores asistidos en el proyecto. El año pasado tuvo un rendimiento agrícola de 2.200 kilos por hectárea. La media nacional es de 1.230 kilos y el promedio departamental hace dos temporadas atrás fue de menos de 1.000. El año pasado fue mejor, recordó Ramón Álvarez, de la oficina local de Extensión Agraria.
El área de algodón orgánico comenzó con 45 hectáreas para llegar en la última zafra a 269 hectáreas. La tendencia es seguir creciendo hasta alcanzar una meta de 500 hectáreas. La superficie total de algodón en el departamento ronda las 2.000 hectáreas. No hace mucho, duplicaba esa extensión. Con esto, la cobertura orgánica representa el 13% del total departamental.