Al realizarse la movilización general de 1932, Oswaldo y Sigifredo, con 17 años, fueron a la capital al Colegio Militar de Campo Grande, en donde recibieron por tres meses instrucción militar participando del Curso de Adiestramiento para el manejo de ametralladoras.
Finalizada la instrucción, fueron asignados al Regimiento de Caballería número 7 General San Martín, en el cual lucharon durante los tres años que duró la sangrienta guerra, comenzando la actuación de ambos en la Batalla de Toledo.
Participaron de la captura de los tanques de la Novena División boliviana en el km 22 del camino Alihuatá – Saavedra, el 10 de diciembre de 1933, cortando así la retirada de estos. En la ocasión de la toma de los tanques, mencionaron que las dos máquinas eran escuchadas mucho antes de llegar, porque hacían un ruido infernal.
La historia de la toma es conocida: Los del RC7 derribaron árboles de quebracho delante, detrás y a los costados de los tanques y así impidieron el paso de los tanques, que ya no pudieron moverse. Luego dispararon contra los tanques, sin causar daño alguno, y por último se acercaron a las dos máquinas y comenzaron a pegar con las culatas de sus fusiles.
Varias veces intimaron a quienes estaban adentro a que salieran y se rindieran pero no recibieron respuesta, hasta que el calor y la situación les obligó a salir.
Quienes manejaban los tanques eran alemanes, por lo que no comprendían muy bien el español; Oswaldo, cuya lengua materna era el alemán, logró comunicarse con ellos y explicarles que no había otra opción más que la rendición. Uno de los tanques capturados estuvo mucho tiempo en la hoy llamada Plaza de Armas y luego fue devuelto a Bolivia.
Ambos pasaron el Parapití y llegaron hasta las mismas estribaciones andinas, junto al famoso RC7 “San Martín”. En Caranda’yty, el 23 de diciembre de 1934 Oswaldo Tischler fue herido y recibió esquirlas de un mortero en un brazo y una pierna.
Ambos, teniendo el rango de teniente Segundo durante la guerra; a la finalización fueron promovidos a teniente Primero. Sigifredo Tischler, por el servicio a la patria, recibió la medalla Cruz del Chaco; mientras que Oswaldo Tischler recibió las máximas distinciones: La medalla Cruz del Chaco y Cruz del Defensor.
Luego de la guerra Oswaldo Tischler se radicó en Obligado, donde se casó con Ana Müller y con quien tuvo cuatro hijos: Ernesto, Edith, Elba y Rodolfo. Luego, se radicó en Argentina, en Santo Pipó, donde en segundas nupcias con Ramona Encina, tuvo dos hijas: Susana y Miriam.
Sigifredo se radicó en Bella Vista, se casó con Sibilla Wollmeister y tuvo 10 hijos: Waldemar, Elfride, Armin, Ilma, Egon, Silvia, Lelia, Lauro, Margarita y Doris. Doris justamente habló con ÚH diciendo que la familia siente un gran orgullo por sus padres. “Para nosotros es un enorme orgullo que nuestros padres hayan tenido mucho coraje, valentía y patriotismo en la guerra“, dijo. NM