Inglaterra derrotó con total autoridad a Nueva Zelanda por 19 a 7 en el Mundial de Rugby y se clasificó como primer finalista del torneo que se disputa en Japón.
La Rosa hizo un partido casi perfecto para sacar de competencia al bicampeón mundial y considerada la mejor selección del mundo, los All Blacks neozelandeses.
Los ingleses entraron a la cancha con toda la convicción, ya desafiando el tradicional ritual maorí haka de los All Blacks en la previa, en la cancha fueron firmes con la marca y certeros a la hora de convertir para romper la hegemonía negra. Se habían enfrentado en 41 ocasiones, con 33 victorias para los oceánicos, siete para los ingleses y un empate. Hoy a las 6.00, Sudáfrica y Gales decidirán al otro finalista del mundial.