EFE
“Desafortunadamente el presidente Trump acaba de destruir cualquier posibilidad de dos estados” declaró ante un grupo de periodistas en su casa de Jericó, claramente apesadumbrado y con la voz entrecortada.
“Ha tomado una acción para reconocer a Jerusalén como capital de Israel. Esto es una contradicción total de los acuerdos firmados entre palestinos e israelíes. El artículo 7 del Acuerdo Interino especifica que ningún Estado debe tomar acciones que prejuzguen o predeterminen los asuntos relativos al estatus final, incluido Jerusalén”, añadió.
La decisión anunciada hoy, afirmó, “prejuzga, dicta y cierra puertas para las negociaciones”.
“El presidente Trump hoy ha descalificado a los Estados Unidos de América para jugar cualquier papel en cualquier proceso de paz”, sentenció.
Trump señaló que su país reconoce a Jerusalén como capital de Israel y que ha dado instrucciones al Departamento de Estado para que comience a planificar la construcción de un edificio para trasladar la embajada que actualmente tiene en Tel Aviv, como el resto de países que retiraron sus embajadas de la Ciudad Santa.
A pesar de que el presidente estadounidense señaló que su decisión no define las futuras fronteras de la ciudad y apoyó la solución de dos estados si israelíes y palestinos la acuerdan, la medida es vista por estos últimos como un reconocimiento de la soberanía israelí sobre la parte oriental de la ciudad, ocupada desde 1967, y que reclaman como capital de su futuro estado.