Tamara Celano
Alfons Bernhard Adam, propietario y director general de Britannia, partió ayer, a los 62 años, tras padecer una enfermedad. Con 30 años al frente de su local nocturno, se convirtió en una leyenda de la noche asuncena y parte de la historia del centro de la capital.
La vida de Alfons no puede ser contada sin las noches de Britannia Pub, el local ubicado sobre Cerro Corá 851 entre EEUU y Tacuary, que abría todos los días (salvo los lunes) durante la segunda mitad de su existencia. El pub visitado asiduamente por artistas, empresarios, gente de oficina y viajeros de todo el mundo es un punto lleno de historias, una referencia para cualquiera que quiera conocer la noche asuncena, especialmente para los que disfruten de la buena música y de las largas charlas. El Britannia, aunque con gran presencia de viajeros con los que los locales practican rebuscadas versiones del alemán, inglés, francés y otros idiomas, es principalmente un espacio lleno de rostros conocidos, algunas mesas y espacios en la barra, incluso ya están reservadas casi por derecho moral para visitantes asiduos. Así, al entrar, si no se los ve, aunque no se pregunte en voz alta, se tiene la sensación de que a la noche le falta algo. Fenómeno debido a la comunidad que se creo con una silenciosa complicidad, una familiaridad que nació muchas veces sin la necesidad de haber cruzado jamás palabras, sino con la coincidencia del gusto por el lugar compartido. Así, entre esas caras familiares, la ausencia se hace patente con la partida de Alfons, los habitués verán aquella mesa vacía, la primera, cerca de la entrada, pasando el pasillo a la mano derecha. Tampoco lo verán recorriendo el patio o la terraza, en bermudas, camisa y sandalias (con medias en días fríos) y sus lentes con tirantes colgados sobre el pecho. Tampoco lo escucharán con su castellano hablado y pensado desde el alemán. LLEGADA A PARAGUAY Alfons nació el 29 marzo de 1958 en Múnich, Alemania. A Paraguay llegó en setiembre de 1986, y en principio su intención no fue permanecer en el país, pero terminó adquiriendo el pub en 1993 del inglés Charles Dunbar-Jones, quien fundó el local en 1990. Antes probó suerte con un restaurante llamado Restaurante de Europa, con una muy mala experiencia y la heladería Alemana. Alfons, quien confesó en una entrevista para la revista Vida de Última Hora que no tenía idea sobre Paraguay, llegó a América del Sur para tomarse un año sabático en Río de Janeiro, Brasil. La visa de turista que le permitía permanecer en el vecino país estaba a punto de expirar por eso decidió cruzar a Ciudad del Este, para realizar el ingreso de vuelta. Pero una vez en el país optó por conocer Asunción, y así permaneció en la capital paraguaya, donde incluso formó una familia junto a su esposa María Duré, con quien tuvo a Alfons Adam Jr.
Britannia Pub despidió, junto con sus clientes, a su director y propietario Alfons Bernhard Adam, con un homenaje en redes sociales.
A puertas cerradas
Todavía con las medidas de la cuarentena a puertas cerradas se recibió el homenaje de los asiduos clientes del bar, a quienes se los invitó a dejar flores frente a las puertas de madera del local que ahora están cerradas por la pandemia. “Siguiendo el protocolo del Covid-19 no habrá velatorio, de igual modo comunicamos a quienes quieran pasar a dejar un saludo pueden hacerlo dejando una flor frente al pub”, se lee en la publicación en Facebook que fue replicada más de 800 veces con 5.000 reacciones.