Los jugadores de hockey sobre hierba argentinos Lucas Martín Rey y Facundo Callioni, ganadores de la medalla dorada en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016, figuran en la nómina de alrededor de 30 deportistas que supuestamente tomaron sustancias prohibidas y que fue difundida en los últimos días por ‘hackers’ rusos.
“En ninguno de los dos casos se puede hacer referencia a controles de doping (dopaje) positivos. Por el contrario, estos jugadores siguieron el proceso correcto para competir bajo la reglamentación de la WADA (Agencia Mundial Antidopaje, por sus siglas en inglés)”, explicó la CAH en un comunicado.
La Confederación informó de que “se encuentra en contacto” con la Federación Internacional de Hockey (FIH) y la Agencia Mundial Antidopaje para “aclarar la situación”.
“En los años 2010 y 2014 los jugadores Facundo Callioni y Lucas Rey, respetando los procedimientos establecidos por la WADA, solicitaron a través de un formulario de TUE (Therapeutic Use Exemption), autorización para recibir por única vez tratamiento terapéutico con utilización de sustancias prohibidas con conformidad de la comisión médica de la FIH”, detalló la CAH.
Javier Blanco, médico del seleccionado argentino de hockey, explicó este martes en diálogo con el canal TyC Sports que “no son controles positivos”.
“Simplemente son tratamientos que se realizaron tanto con la aprobación del comité médico de la FIH como el de la WADA. Repito, no hay ningún control positivo”, aseveró.
“Son sustancias que están dentro de las listas de sustancias prohibidas, pero si uno justifica la utilización de las mismas y lo avala con estudios médicos y una historia clínica no hay problema en que los autoricen. Ellos también pueden negarse a autorizarlo si lo consideran”, se explayó.
Blanco detalló que los tratamientos se realizaron por “bloqueos” en la columna producto de molestias físicas.