Los viejos vagones del ferrocarril que sirven en la actualidad como biblioteca pública cuentan ahora con jardines de plantas ornamentales y empastado que fueron creados por obreros de Aseo Urbano de la Comuna capitalina.
Las mejoras abarcan los separadores, rotondas y paseos, con colocación de canteros e isletas verdes y florales, en las zonas más próximas a este sitio ubicado sobre la calle Manuel Gondra entre España y El Paraguayo Independiente.
Un total de diez variedades de pequeñas plantas de diferentes especies de flores y 400 metros cuadrados de pastura fueron dispuestas por los trabajadores municipales, a las cuales se agregaron arbolitos, a modo de reforestación del lugar.
Todas las especies vegetales provienen íntegramente de los viveros del Municipio, informó el director de Áreas Verdes, ingeniero Víctor Amarilla, quien dijo que las tareas forman parte del hermoseamiento y remozamiento de la zona céntrica de la ciudad.
En forma complementaria, la cuadrilla de jornaleros procedió igualmente a pasar pintura general a los cordones de las aceras y a reparar el sistema de iluminación de todo el sector.
VISTO BUENO. La gente de este punto indicó que todo se encuentra muy mejorado y dista mucho de aquella difícil situación que les tocó vivir a finales del 2006, cuando un tornado derrumbó parte de la calle Gondra.
Asimismo, comentaron que en esa época también se tenían en ese trayecto los derruidos vagones de la primera locomotora que solo servían para criar alimañas, depositar basura o de aguantadero para delincuentes que atacaban a las personas que osaban pasar por este sector capitalino.
El ingeniero Víctor Amarilla puntualizó que desde este momento se encargarán de realizar periódicos mantenimientos para evitar que los elementos de belleza introducidos a lo largo de esa franja ribereña se deterioren muy rápidamente.
El resultado está a la vista.