El Departamento de Comercio había anunciado el viernes que prohibiría la descarga de una de las aplicaciones más populares de China en nombre de la seguridad nacional. También prohibió el uso de la aplicación, utilizada por unos 19 millones de usuarios en suelo estadounidense para mensajería, compras, pagos y otros servicios y para cualquier transferencia financiera e impidió cualquier servicio de soporte técnico en WeChat.
Básicamente, “aunque técnicamente estuviera disponible para los estadounidenses que ya la hubieran descargado, la aplicación probablemente les habría resultado inútil”, resumió la jueza Laurel Beeler en respuesta a una consulta de la AFP.
Las restricciones gubernamentales habían sido impugnadas en los tribunales por un grupo de usuarios, quienes afirmaron que afectaban en gran medida las relaciones profesionales y personales dentro de la comunidad de habla china en Estados Unidos. A muchos usuarios de WeChat les preocupaba que ya no pudieran comunicarse con sus seres queridos a ambos lados del Pacífico.
Acuerdo para TikTok. La prohibición de descarga anunciada el viernes también afectó a la popular aplicación de videos cortos TikTok, utilizada por 100 millones de personas en Estados Unidos.
Pero esta última resolución se pospuso la noche del sábado hasta el 27 de septiembre luego que TikTok llegara a un acuerdo sobre la gestión de sus actividades en Estados Unidos con Oracle y Walmart que recibió el visto bueno del presidente Donald Trump.
El acuerdo anunciado el sábado aún no ha sido finalizado por las empresas involucradas ni aprobado por el Comité de Seguridad Nacional del gobierno de Estados Unidos.