Los jóvenes colorados, fiel a su estilo prepotente y altanero, se mostraron contrarios a la resolución del Tribunal Electoral Partidario (TEP) y comenzaron a incidentar en la sede partidaria al término de la sesión de los miembros del Tribunal. Tras más de tres horas de debate, y luego de escuchar a los representantes de los principales movimientos, el órgano electoral estableció que las elecciones sean el 16 de agosto del 2020.
A través de la resolución 632, el TEP colorado fijó la nueva fecha de las elecciones. En el documento, el colegiado hace constar que se considera conveniente, por mayor garantía, seguridad y confiabilidad, además de cuestiones financieras y procesales, reiniciar el proceso y realizar las elecciones en la nueva fecha.
Tensión. Sin embargo, jóvenes de los movimientos Fuerza Renovadora Republicana y Compromiso Joven, no aceptaron la nueva fecha y se mantuvieron movilizados, impidiendo en todo momento la salida de los miembros del Tribunal, por lo que la situación se volvió tensa.
Uno de los reclamos principales es que, con la nueva fecha, muchos de los jóvenes que pretenden cargos tendrán más edad de la establecida para participar como postulante, por lo que sus candidaturas serán anuladas.
Por este motivo, incluso tuvieron que intervenir asistentes fiscales para dar garantías a la salida de los miembros del Tribunal, lo cual se concretó pasadas las 21.00, en medio de custodia policial. No obstante, el Partido Colorado presentó una denuncia formal por “hechos vandálicos”, por destrozos de mobiliarios y cámaras de seguridad.
El que brilló por su ausencia, fue el propio presidente de la ANR Pedro Alliana, quien sólo atinó a “festejar” la decisión del TEP de postergar las elecciones a través de sus redes sociales.
El viceministro de Asuntos Políticos, Juan Villalba, también se hizo presente e intentó convencer a los candidatos a aceptar la nueva fecha, pero éstos se opusieron, mientras que en conferencia de prensa, los miembros del TEP denunciaron que fueron “secuestrados” por los jóvenes.