Se trata de Gisele Beatriz Acosta (19), empleada de una red de supermercados. El cuerpo fue hallado por el propietario del taller, quien dio aviso a la Policía.
En un principio no pudo ser identificada, porque no llevaba documentos.
Por orden de la fiscala María Mirtha Martínez, los restos fueron llevados hasta la Morgue Judicial.
Horas después llegó Norma Acosta, quien identificó el cuerpo como el de su hija. Indicó que la joven se dirigía hacia su lugar de trabajo ayer. M. C.