La publicación de la investigación a cargo de la alta funcionaria Sue Gray continúa en el aire y, aunque puede ver la luz en los próximos días, podría dejar fuera los detalles más dañinos para Johnson, que han pasado a ser objeto de una pesquisa policial.
A medida que avanzan los días, se amortiguan las especulaciones sobre la posibilidad de que se alcance el umbral de 54 diputados conservadores pidiendo una moción de confianza interna contra su liderazgo y, el domingo, dos de los principales aspirantes a sustituirle ofrecieron muestras de respaldo que le otorgan aún más espacio de maniobra.
IMAGEN DE UNIDAD. El ministro de Economía, Rishi Sunak, que durante semanas ha evitado defender de manera explícita a Johnson, firmó el domingo un artículo en The Sunday Times a cuatro manos con el jefe de Gobierno en el que ambos confirman que subirán impuestos en abril, un plan impopular entre una facción de los “tories”. El escrito conjunto refuerza la imagen de unidad entre Johnson y uno de sus posibles rivales.
Con todo, incluso si el jefe de Gobierno logra capear la profunda crisis desatada por el escándalo de las fiestas, puede verse obligado a renovar su equipo más cercano en Downing Street si las investigaciones de Sue Gray y la policía acaban salpicando a sus colaboradores. EFE