Confirmó que no puede firmar cheques por una inhabilitación del Banco Visión del año 2014 al 2017, que ya debió ser levantada.
Relató que estando fuera de la función pública se dedicaba al comercio y tuvo problemas económicos, por lo que le rebotaron cheques, pero no porque se hayan emitido sin fondo.
En cuanto a la imputación por producción mediata de documentos públicos de contenido falso, explicó que fue producto de una operación comercial por una compra de inmueble en 2013. Mencionó que realizó el trámite por escribanía incluyendo pagos y transferencias. Sin embargo, los vendedores, más tarde, quisieron volver a efectuar el cobro, a lo que Vera responde que ya pagó. “Y no tuvo mejor opción que denunciar ante la Fiscalía en 2017, pero tengo tres pedidos de sobreseimiento por esa causa”, aclaró.
Vera indicó que aguarda que el Juzgado se expida y que el caso no tiene nada que ver con sus tareas en la función pública.
En cuanto a su despido del Ministerio del Interior en 2010, contó que sucedió cuando Rafael Filizzola era ministro y fue una medida “arbitraria”, pero tras una demanda, fue repuesto en el cargo en 2019. “Se inició un sumario por rehusarme a firmar dictámenes que me solicitó el director jurídico. No hay nada que ocultar, todo lo que hago es transparente”, recalcó.
Si utilizan eso para desvirtuar el trabajo que hacemos en intervención están apuntando a otro lado.
Pablo Vera,
interventor de Guairá.