Este martes se llevó a cabo la apertura del 16º Congreso Internacional de Responsabilidad Social Empresarial (RSE) y Sostenibilidad, organizado por la Asociación de Empresarios Cristianos (ADEC). En la ocasión, el presidente del gremio, Jorge Figueredo, ofreció un discurso en el que destacó la importancia de formar líderes empresariales comprometidos con el bien común y con una visión trascendente del desarrollo.
“El Paraguay que soñamos no se va a construir solo. Necesita de cada uno de nosotros, desde donde estemos: en la empresa, en la universidad, en nuestras comunidades y en nuestras familias”, expresó Figueredo durante su intervención.
El lema de este año, “Construyendo un futuro sostenible desde la esencia”, busca poner en valor los principios y valores que deben guiar al liderazgo actual, especialmente en el ámbito empresarial. “La sostenibilidad no es una moda, sino una forma consciente de avanzar en el desarrollo del país, sin renunciar a la prosperidad empresarial”, sostuvo.
Durante su alocución, el titular de la ADEC recordó una anécdota compartida en una reunión de Uniapac en el Vaticano, donde un profesor del Insead —prestigiosa escuela de negocios de Francia— instaba a sus alumnos a no ser solo “Máster en Administración de Negocios” (MBA), sino también “Máster en Mejores Alternativas”, con referencia a la búsqueda de soluciones más humanas y sostenibles.
Figueredo también hizo un llamado a los participantes del congreso a no limitarse a escuchar, sino a actuar. “Este congreso no es solo para escuchar: es para despertar. Para compartir ideas, conectar con otros que quieren lo mismo y salir de aquí con la firme decisión de actuar”, enfatizó.
El presidente de ADEC subrayó la urgencia de contar con líderes comprometidos, jóvenes con propósito y empresarios conscientes del impacto social y ambiental de sus decisiones.
“Más que nunca, Paraguay necesita empresarios que miren el rostro humano y el entorno en el cual son parte. Que a través del ejemplo construyamos una sociedad más justa y próspera”, manifestó.
Citando al papa Francisco, Figueredo recordó que “los empresarios son actores claves del desarrollo y el bienestar. Son un motor esencial de riqueza, prosperidad y felicidad pública”. Añadió además que “la fraternidad se construye con solidaridad, y la solidaridad es fruto de la gratitud”.
Figueredo agradeció a las empresas auspiciantes, a la Junta Directiva, al Comité de Socios de RSE, a los medios de comunicación y al staff de ADEC, por hacer posible un nuevo encuentro que busca dejar una huella positiva.
“Gracias por creer en un Paraguay sostenible, justo y solidario. Que este congreso sea un punto de partida para transformar, inspirar y construir el legado que queremos dejar a las futuras generaciones”, concluyó.