El líder juvenil del grupo instalado en Acaraymí, Leonardo Alfonso Martínez, explicó que la comunidad depende prácticamente de las lluvias porque no cuenta con sistema de agua potable ni pozo artesiano, solo dispone de un pozo común que se carga con las precipitaciones climáticas, según informó la Unión de Gremios de la Producción. “Los cultivos están perdidos, no tenemos mandioca, no tenemos hortalizas, soja ni maíz, ninguno de los alimentos que consumimos día a día se está salvando”, lamentó el estudiante de Ingeniería Agronómica.
La sequía afecta a todos los cultivos de verano e impacta mayormente a los pequeños productores.