Se trata del teniente Gilberto del Pilar Espinoza Matto, encargado del destacamento naval Teniente Escumbarti de Hernandarias, quien fue imputado con pedido de prisión preventiva por los supuestos hechos de privación ilegítima de libertad, coacción grave y extorsión.
La fiscala Zunilda Martínez manifestó que el militar, en su declaración indagatoria, negó los hechos, informó el periodista de Última Hora Edgar Medina.
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El uniformado le manifestó que vio a la víctima Nelson Daniel Benítez González, quien supuestamente trabajaba como pasero de cigarrillos en la zona, y al pasero Fernando Delvalle, alias Cano, quien está detenido, cuando conversaban con desconocidos, pero que no supo de qué hablaban.
El caso
La investigación apunta a que Nelson Benítez estuvo retenido en la base naval de Hernandarias y que el trasfondo del hecho es el tráfico ilegal de armas en la Triple Frontera.
Si bien en un principio la víctima dijo que lo raptaron cerca de un motel, los investigadores refieren que fue convocado a la base naval y que fue hasta ahí por su cuenta.
Según relató Benítez, fue retenido presuntamente en el predio militar por el teniente Gilberto Espinoza, que le exigía saber dónde estaba un cargamento de tres armas de fuego largas que desaparecieron y estaban a cargo de su primo, el también pasero Cristian González.
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Siempre según su relato, Benítez en todo momento dijo que no tenía nada que ver con la desaparición de las armas –que serían fusiles AK47, de acuerdo con la investigación– y tuvo que llamar a su madre, que está en España, para que le enviara dinero para que lo liberen.
Finalmente, la madre envió desde España los USD 6.000 y Benítez fue liberado en el lado brasileño, por lo cual tuvo que volver en mototaxi a Ciudad del Este.