El vicepresidente del Centro de Importadores de Vehículos Usados, Luis Pereira, celebró ayer que finalmente Brasil haya decidido suspender la medida de aplicar un arancel del 16% sobre las importaciones de autopartes provenientes del Paraguay y adelantó que desactivan las medidas que habían anunciado, como el cierre de las fronteras.
“Celebramos esta suspensión, la ministra (Liz Cramer) nos remitió una nota invitándonos para el miércoles, a las 10.00 de la mañana, en el tercer piso del ministerio, para una reunión. Esto tiene andamiaje de diálogo por partes, les hicieron retroceder a los brasileños, pero de igual forma nos obliga a sentarnos a hablar del tema. Tenemos la disposición del Gobierno y vamos a estar”, expresó.
Siguió: “El panorama es auspicioso, por lo menos la medida de fuerza que estaba programada creo que mañana se va a desactivar, tenemos que estar atentos”, dijo.
Alfredo Franco, presidente de la Asociación de Cigüeñeros del Paraguay, ratificó que en ningún caso se debe aceptar que el país deje de importar vehículos usados. Al ser consultado sobre la suspensión del arancel por parte del país vecino, dijo que “no tienen todavía nada claro y específico” y que no estaban en el afán de que “la gente nos venda espejitos”.
Indicó que hoy se reunirán al mediodía entre los gremios para encaminar “el próximo paso” que darán.
Desde el principio, Pereira criticó que Brasil exija al Paraguay dejar de importar autos usados vía Chile como parte de un acuerdo automotriz. Actualmente, se importan 73.000 vehículos usados al año, entre automóviles, camionetas y camiones.
El gremialista cuestionó que se quiera dejar de lado a un “sistema económico” que afecta a más de 500.000 personas directa e indirectamente.
Además, mencionó que ese sector deja ingresos al Fisco por USD 554 millones por año, mientras que, según su versión, la industria de la maquila solo ingresa USD 300 millones y tiene una carga impositiva del 1%.
