A partir de la víspera hay “un toque de queda especial para Choloma”, informó Castro en su cuenta de Twitter.
La decisión se tomó después de que 13 personas fueran acribilladas en la noche del sábado último en un billar de la localidad de Choloma, vecina de San Pedro Sula, la segunda ciudad del país, situada 180 km al norte de la capital Tegucigalpa.
En San Pedro Sula y Choloma “he tomado medidas para darle seguridad ante el brutal y despiadado ataque terrorista a que están sometiendo los matones a sueldo entrenados y dirigidos por los cabecillas del narcotráfico, que operan impunemente en el corredor de la droga, Valle de Sula”, añadió la gobernante.
Testigos publicaron videos de los cuerpos ensangrentados en el piso de un salón de billar, donde dijeron que compartían el cumpleaños de una de las víctimas.
Según esas versiones, desconocidos llegaron con armas automáticas al salón para atacarlos sin darles tiempo de escapar. Diez murieron en el lugar y el resto en un hospital.
El ataque se produjo cinco días después de la masacre de 48 reclusas en una cárcel de mujeres. AFP
