En la Cámara de Senadores tuvo entrada el jueves pasado el proyecto de ley que cambia el régimen de jubilaciones para los odontólogos y bioquímicos dependientes del Ministerio de Salud Pública, cuya media sanción se dio en Diputados el pasado 8 de mayo en sesión ordinaria.
Esta propuesta es idéntica a la que establece los nuevos parámetros para los médicos, ya que aquellos profesionales odontólogos o bioquímicos que hayan cumplido los 55 años y hayan aportado 25 podrán jubilarse con el 90% de su salario promedio de los últimos tres años. Para que la jubilación sea del 100%, el aporte debe realizarse por 30 años y se debe contar con 60 años de edad.
El proyecto fija también que solamente con 12,5 años de aporte y sin una edad mínima se podrá acceder a una media jubilación.
La fecha tope para su tratamiento en la Cámara Alta es el 21 de agosto. Por el momento, la propuesta fue derivada a las comisiones asesoras para dictaminar.
POLÉMICO. Desde Hacienda ya adelantaron que aconsejarán al Ejecutivo vetar este proyecto si es sancionado por el Congreso. Es que la principal preocupación de la cartera es la sostenibilidad de la Caja Fiscal.
El estudio hecho por la institución indica que teniendo en cuenta solamente las modificaciones de parámetros establecidas en la ley de jubilación médica, ya el año próximo la Caja Fiscal deberá usar sus reservas para cubrir el déficit del sector civil, reservas que al ritmo de pagos actuales se agotarán en 2027.
El viceministro de Administración Financiera y actual ministro sustituto de Hacienda, Óscar Llamosas, señaló que la postura de la cartera es no otorgar más privilegios a sectores específicos en detrimento de otros.
Indicó que lo ideal sería que el Senado rechace el planteamiento, pero en caso de no hacerlo, seguirán la misma línea tomada con respecto a la ley de jubilación médica.
“Esto (ley médica) lo que hace es acelerar aún más el deterioro de la Caja Fiscal y genera incentivos para que otros sectores también se sientan con los mismos derechos”, expresó Llamosas.